lunes, 7 de enero de 2019

Raimundo Sánchez y su mágico mundo animal



Enero 2019, nos  despertamos con una mañana gélida, porque ha caído una gran helada, una buena "pelua", donde todo parece estar congelado, dónde todos es quietud y nada se mueve, dónde las hierbas blancas e hirsutas convierten a los prados en lagos de plata..., digo que, en esta mañana fría, todo parece congelado, excepto los recuerdos y andanzas de nuestro amigo Mundo.
 He quedado con Raimundo Sánchez, Mundo, para los amigos, para que me enseñe por dónde posan las grullas, e intentar fotografiarlas, que como bien sabéis, todos los otoños vienen a nuestro pueblo, Zarza de Granadilla, a pasar el invierno en la dehesa.

De camino hacía las vegas del río Ambroz, Mundo me va contando un poquito de su intensa vida...
Todos sabemos que, actualmente, tiene una bonita familia, que está casado con Inés, que tiene tres hijos, nietos y biznietos...

 Él comienza a descongelar los recuerdos agazapados en su memoria con calor del amor y la nostalgia... Y me cuenta que, su padre se llamaba Alfonso, nacido en el Guijo y de profesión pastor de ovejas.
Su madre se llamaba Adela, nacida en Lagunilla, se dedicaba a las labores del hogar, que tuvo 14 hijos, de los cuales sobrevivieron 8, los otros 6 murieron siendo niños.

Él nació en Enero de 1936, malos tiempos para nacer, con una guerra inminente y una posguerra llena de miseria, hambre y calamidades.
Procediendo de una familia humilde, como éramos la mayoría de las familias de Zarza... en aquellos malos tiempos..., Mundo, que era el mayor de los hijos, tuvo que dejar la escuela a los ocho años para ayudar a su padre en las tareas del pastoreo.

Le imagino en el campo con sus ovejas, su zurrón, su honda, su tirachinas y sus cepos...
Imagino un niño alegre, guapo, espigado, vivaz y muy listo, ingeniándoselas en la caza de algún pájarillo, o lagarto... para completar su comida, pues eran años de escaseces y el ingenio se agudizaba de manera singular...
Es muy probable que, de esos años de pastorcillo, se alimentara su pérfil de hombre observador, paciente y mimético con la naturaleza...
Como así ha demostrado ser en la edad madura, con sus espectaculares fotografías y vídeos a los que nos tiene acostumbrados...
Instantes mágicos y únicos, que solo una persona como él ha podido captar con su cámara y sus reportajes de vídeo.

-No pares el coche, que se asustan las grullas, continúa..., baja la ventanilla y dispara... (me dice)
Increíblemente, cuando nos acercamos a las grandes extensiones de praderas de rastrojos de los maízales, aparecen, en hileras, centenares de grullas... que curiosamente, si no paramos el coche no emprenden el vuelo.
Es la primera vez que veo tantas grullas posadas, normalmente se espantan... al menor movimiento.


















Vamos camino hacía un chajurdo que tiene en un punto estratégico para observar  a las aves...
Me sigue contando, que ya de zagal dejó de ser pastor y se fue a trabajar al tejar, más tarde, trabajó de peón de albañil con mi padre( de ahí le viene la gran amistad que tenían, ambos).
También emigró a Alemania, pero solo estuvo un mes...al parecer no se adaptaba bien...
Recordamos la caseta de tiro con balineras y la tómbola, que montó en la carretera, que  sólo abría los domingos y días de fiestas.
Lugar de reunión y diversión de todos los jóvenes del pueblo...Intentando mostrar sus habilidades de puntería... delante de las chicas, para obsequiarlas con un rico chicle bazoca de tres pisos...
De repente vienen a mi memoria centenares de boletos sin premio tirados en el suelo, y colgadas, en la caseta, las ricas cayadas con colorines de caramelo, y hachas rojas enormes de un caramelo dulzón y pegajoso, bonitas muñecas de plástico con los ojos estrábicos, cochecitos de plástico, espadas, y escopetas de corcho...

Y, ya por los años 70 fue propietario del mesón de las tres banderas. que tuvo mucho éxito...
Ahora cuando veo ese bonito mesón convertido en un almacén de Ferrovial me da una pena enorme.

Pero, continúa diciéndome, su verdadera profesión llegó después de hacer un curso de fontanería, y ya sería su profesión hasta su jubilación.



















-Mundo todos sabemos que eras cazador..., yo te he visto muchas veces ir de caza con mi padre, mi tío Pichi, Trino y mis hermanos...
¿Qué te hizo cambiar la escopeta  por la cámara fotográfica? -Pregunto-

Se pone serio y me dice:
He sido un cazador empedernido, pero entonces, ni yo..., ni mis amigos cazábamos por el placer de disparar, la caza formaba parte de nuestra dieta. Antes no era como ahora... que hay de todo en las tiendas...
Cuando comencé a darme cuenta que ya no necesitábamos la caza para para alimentarnos, dejó de tener interés para mi.
Gracias a un amigo, Antonio "el de Bilbao", que es un gran fotógrafo, al que yo le servía de guía,  me sentí atraído por la fotografía.
 Me compré una cámara de vídeo y después una cámara fotográfica, empecé a sentir más placer disparando con la cámara que con la escopeta... Hasta tal punto que ahora mismo me sería totalmente imposible ser cazador.
No puedo entender como, ahora, cazadores desaprensivos, matan por el placer de matar caza mayor,  con el único fin de arrancarles los colmillos a un jabalí. O decapitar ciervos tan solo para quitarles la cornamenta.
Esto, lamentablemente, es cierto. El año pasado yo vi una escena de estas detrás de unos matorrales, y me causó una gran impresión.

-Bueno, Mundo, entonces entiendo..., que tus tocayos, los conejos, te lo habrán agradecido...jajajaja.

-¿Por qué te llaman Mundo "Conejo"?

Se ríe, y me dice:
- Pues no es porque tenga cara de conejo... jajaja, resulta que mi abuelo cazaba liebres y mi abuela las iba vendiendo por las casas... y, cuando la veían llegar, decían, que viene la tía liebre..., y de ahí,lógicamente, a los descendientes, nos vino el mote de "conejos".
Nunca me ha sentado mal que me llamen por ese mote... ni tampoco, Mundo "caseta", que me lo puso tú padre...jajaja.

Hemos llegado hasta el lugar donde tiene montado su chajurdo, el observatorio de aves que se ha montado, donde pasas horas y horas para conseguir magníficas fotografías... y me dice, que va a hacer otro justo al lado contrario y que tiene varios por todo el río.
Me parece maravilloso que una persona a su edad continúe siendo tan alegre y vital y que emplee su tiempo libre en estos menesteres.







A continuación vamos al rincón del fresno, un bonito paraje del río, con una laguna. Me cuenta que en esta parte del río  fotografió a la nutria que está comiéndose un pez.
Según él,  a penas, quedan dos o tres parejas de nutrias en el río. Al parecer hay personas que disfrutan matándolas.
Lo mismo ocurre con los tejones que  cada vez hay menos.
En cuanto a las cigüeñas negras sólo quedan tres o cuatro parejas...
Lleva un control muy exhaustivo de los animales en peligro de extinción en la zona.

Vamos a poner punto y a parte a este bonito e interesante reportaje pues se nos cae la moca..., estamos ateridos por el frío y nos vamos al pueblo a tomar un cafetito, ya quedaremos otro día por el pinar de Granadilla donde, me dice Mundo que, los ciervos ya le posan.

Gracias, Mundo por esta mañana tan interesante, ha sido un placer compartirla contigo...
Espero que sea reconocida tu gran labor muy pronto.
Yo desde aquí insto al Ayuntamiento de Zarza, a la Manconunidad, a Proyecto M , que sepan aprovechar toda tu obra y editen un precioso libro de carácter didáctico, cultura y ecológico con todas tus fotografías y vídeos. Qué seguro, tendría un gran éxito.
¡Suerte y salud, amigo Mundo!

A continuación pongo, para los que no le conocéis, una pequeña muestra de su gran obra fotográfica. Aunque el insiste que los vídeos son más interesantes, yo, aquí en mi blogger no puedo subirlos...